Abanico Tejido a Mano Blanco
Descubra la elegancia y sostenibilidad de nuestros abanicos hechos a mano
Diseñado con un compromiso inquebrantable con los principios ecológicos, el abanico ecológico artesanal de Lula Mena es mucho más que un accesorio elegante: es una poderosa declaración de lujo consciente. Cada abanico es el resultado de la dedicación de Lula Mena a la preservación de técnicas artesanales centenarias y, al mismo tiempo, a la creación de oportunidades que cambian la vida de las mujeres de las comunidades vulnerables de El Salvador. Esta pieza artesanal está tejida por hábiles artesanos que dan vida a historias, tradiciones e identidad cultural con cada hilo, lo que hace que cada abanico sea tan único como las manos que lo crean.
Fabricado con materiales naturales, reciclados y ecológicos, el abanico encarna la armonía entre el diseño contemporáneo y la responsabilidad medioambiental. El meticuloso proceso de tejido a mano permite la preservación de las técnicas tradicionales, transmitidas de generación en generación, al mismo tiempo que muestra la innovación que anhelan los consumidores modernos.
Más que un objeto bellamente elaborado, el abanico de Lula Mena representa el empoderamiento de las mujeres artesanas. Al comprar este abanico, estás contribuyendo directamente a la misión de Lula Mena de transformar vidas a través de prácticas de comercio justo.
Este abanico es más que un accesorio: es una celebración de la cultura, la artesanía y la compasión.
INCOME
SCHOOLING
58% of the people that live in rural areas in El Salvador live in overcrowded conditions. When there is overcrowding in families, there is a higher risk of certain problems occurring, such as domestic violence, family disintegration, poor school performance, among others.
300 SALVADORANS TRY TO MIGRATE TO THE UNITED STATES DAILY DUE TO LACK OF WORK OPPORTUNITIES.
When Lula Mena began working in rural communities, many of the young women wanted to immigrate to the United States. Now that they have seen that there is an opportunity for a better life in their community, their perception of immigration has changed. They feel more confident that they will be able to provide for their families without having to leave the country. We want to continue to grow in order to offer more young adults the opportunity to work with us and avoid immigration.
One of the major challenges we faced when we began working with women was gaining the approval of their husbands. Most of the husbands and family members worried that the women would not be able to work and meet the household’s responsibilities.
Now, their husbands prepare dinner, take care of the children, and offer them support. There is still a strong sexist culture, “machismo”, in rural areas of El Salvador that we are trying to change by empowering women.